Nuestra fundación
La Fraternidad Verbum Spei fue fundada el 2 de febrero de 2012 en el cerrito del Tepeyac a los pies de Nuestra Señora de Guadalupe, para trabajar en un nuevo despertar de la Esperanza en la Iglesia actual y en el corazón de todo hombre de buena voluntad.
Las apariciones de la Virgen María en 1531 abrieron la vía de la conversión del continente americano en un período de grandes cambios. La Fraternidad Verbum Spei desea, siguiendo la enseñanza de la Virgen María, continuar el trabajo de la evangelización del mundo contemporáneo golpeado por la falta de Esperanza y la pérdida del sentido de la vida.
Buscando volver constantemente a las fuentes de la vida contemplativa y apostólica de Cristo, los hermanos desean vivir sincera y verdaderamente una vida conforme al Evangelio, en la tradición monástica de oración continua, búsqueda de la verdad, y anuncio del Reino.
A través de la oración cotidiana y de la adoración eucarística, del conocimiento realista de la persona humana, junto con el estudio de las Sagradas Escrituras y de la Tradición, los hermanos se esfuerzan en vivir los consejos evangélicos de pobreza, obediencia y castidad, con el auxilio de la Virgen María y de la Misericordia divina, en una vida común de caridad fraterna vivida de manera simple y auténtica en el interior de cada priorato.
La Fraternidad Verbum Spei es una asociación pública de fieles, en vista de ser erigida como Instituto religioso (CIC 312 §1, 3°), en el cual sus miembros profesan los votos de pobreza, obediencia y castidad, y viven una vida fraterna en común (CIC 573 §2).
El 22 de agosto de 2012 don Raúl Vera López, obispo de Saltillo, promulgó un decreto en el cual estableció la Fraternidad Verbum Spei como una Asociación Pública de Fieles con personalidad jurídica, de acuerdo con los cánones 116, 298-320 del Código de Derecho Canónico. En este mismo decreto aprobó ad experimentum, por tres años, los estatutos de la Fraternidad según el can. 304.
El 18 de junio de 2016, aprobó definitivamente los estatutos de la Fraternidad conforme a la norma de los cc. 312 § 3 y 314 del Código de Derecho Canónico.